Los hielos de La RomaEntre luces de colores, un enorme árbol de navidad y pequeñas casas rústicas que parecen sacadas de alguno de los mejores cuentos decembrinos, la aldea navideña del Jardín Pushkin, enclavada en la alcaldía Cuauhtémoc, recibe a grandes y chicos. Al fondo de la aldea, la pista de hielo atrae a los cientos de niños que en compañía de sus padres se animan a intentar deslizarse, algunos con más trabajo que otros, pero todos con una sonrisa en el rostro a pesar de las caídas y resbalones. Al ritmo de las mejores canciones navideñas y equipados con un buen par de patines, quien entra a la pista deja su miedo sobre las escaleras de acceso e intenta dejar salir a su patinador interior, luciéndose para las fotos del recuerdo, que son sacadas por sus acompañantes desde atrás de la valla metálica que separa la zona de patinaje de la de espera. Mientras tanto, para todos aquellos que no gustan patinar, al principio de la aldea en una pequeña casa con una chimenea al fondo, papá Noel ve gustoso a los niños que durante el año se han portado bien y que le leen su lista de deseos y regalos con la esperanza de que el 25 por la mañana cada uno de ellos aparezca debajo de su pino navideño. El lugar que en cuestión de horas se convirtió en favorito de vecinos de la colonia Roma y sus alrededores tiene, además, lugar para todos aquellos que quieran pasar un rato de diversión en compañía de la familia, pareja o amigos pues ya sea escuchando la música navideña en vivo de algún artista callejero, admirando el imponente y hermoso árbol navideño o siendo sorprendido por una ligera nevada de nieve artificial, la aldea del Jardín Pushkin los espera hasta principios de enero.

Source: La Crónica de Hoy December 17, 2019 08:48 UTC