En entrevista con Crónica, Georgina Godínez, que vive en el departamento 4, explicó que los polines de madera fueron instalados a los dos días del movimiento telúrico por autoridades y rescatistas que intentaron salvar vidas en el colegio Rébsamen, donde murieron 19 niños y 7 adultos. La afectada señaló que en los días de emergencia sólo se les permitió entrar una vez para retirar ropa y documentos personales, y que desde esa ocasión no han vuelto a entrar. “No estamos pidiendo que nos traigan ladrillos o cemento como otras familias, sólo queremos saber cuándo podremos entrar a nuestras casas”, refirió. Godínez agregó que en conjunto con sus vecinos envió hace 10 días un escrito al jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, del cual asegura, no ha tenido respuesta concreta. Respecto al tema de seguridad, dijo que para cuidar sus pertenencias y el inmueble, las 18 familias se turnan para cuidar el inmueble todos los días de la semana, y en la noche contratan a una persona con el mismo objetivo.
Source: La Crónica de Hoy November 06, 2017 06:33 UTC