Tres veces recibió Dina Boluarte al directorio de Petro-Perú presidido por Oliver Stark, cuando las autoridades del MEF y del Minem, que integran la Junta de Accionistas, ya estaban de acuerdo con el plan de salvataje. Aunque finalmente aprobó sus propuestas –que incluían la sostenibilidad del oleoducto y una reducción sistemática de gastos e inversiones–, Boluarte quería que el timonel de la reestructuración fuera Óscar Vera, un prospecto de wayki, de alma gemela en Petro-Perú. Entre 1993 y 1996 fueron vendidos diversos activos de Petro-Perú, por US$673′000.000, pero el dinero no le fue transferido por el Estado. Hay que añadir los desembolsos que Petro-Perú hizo por cuenta del Estado sin que le fueran devueltos. Por ejemplo, Petro-Perú asumió el costo de la exoneración del IGV dispuesta por la Ley de Promoción de la Inversión en la Amazonía, decretada por Alberto Fujimori en diciembre de 1998.
Source: El Comercio November 24, 2024 07:31 UTC