En la sucesión presidencial del PRI la decisión la toma uno, pero la presión la ejercen tres. El “dedo” elector de Peña Nieto definirá si opta por un perfil político o un tecnócrata. Por eso a Peña hoy se le ve exultante y confiado en que “vamos a ganar la elección”. Más bien está diciendo que no habrá obstáculo, legal, moral o de cualquier otro tipo que los detenga a él y a su partido. Así que, traducido al lenguaje peñista, sería: “Vamos a ganar, a cualquier precio y haciendo lo que se tenga que hacer, esta elección”.
Source: El Universal November 06, 2017 09:56 UTC