En esta emblemática avenida parisina, las fuerzas de seguridad francesas usaron gases lacrimógenos y un camión equipado con cañón de agua para alejar a las personas que intentaban forzar un cordón policial. Esta movilización en la capital, de contornos poco definidos, preocupa a las autoridades que temen disturbios. El movimiento se inscribe en la larga historia francesa de contestación social y vocación por las manifestaciones de protesta callejeras. PODER ADQUISITIVOGasolina demasiado cara, impuestos excesivos, pensiones y jubilaciones insuficientes… Las reivindicaciones de este movimiento convergen en una misma afirmación: la pérdida del poder adquisitivo. "En esta zona, ninguna manifestación o reunión, vinculadas con los 'chalecos amarillos' podrá celebrarse" advirtió el prefecto de policía, Michel Delpuech.
Source: El Mañana November 24, 2018 21:00 UTC