Un parámetro que ocupamos, dijo, es la hemoglobina glicosilada que se ve alterada, pues las vacaciones de verano son, incluso, una temporada más larga (de asueto), puede ser un mes o dos. Esta prueba mide el nivel promedio de glucosa o azúcar en la sangre durante los últimos tres meses. “El otro factor es la hiperuricemia, que es la elevación del ácido úrico en la sangre, también por el alto consumo de carne. Las personas, sugirió, deben tener una dieta balanceada siempre, no sólo en vacaciones. Realizar ejercicio después de consumir alimentos altos en grasa, no propicia que se queme el 100 por ciento de calorías.
Source: La Jornada July 04, 2022 17:51 UTC