El país enfrenta una auténtica epidemia de peso corporal excesivo en la que resultan afectados uno de cada tres niños y adolescentes y siete de cada 10 adultos. Hoy, los científicos han identificado, además, a la obesidad como una de las condiciones de mayor vulnerabilidad ante el Covid-19. En un reporte de 2019 sobre el Sistema Alimentario Mexicano, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) establece que el agravamiento de la mala alimentación favorece la coexistencia de desnutrición, sobrepeso y obesidad. Entre 2012 y 2018 el porcentaje de niños con sobrepeso y obesidad con edades entre 5 y 11 años pasó de 34.4 a 35.6 por ciento. Crecimiento aún más significativo se registró en los jóvenes de entre 12 y 19 años al moverse de 34.9 a 38.4 por ciento.
Source: La Jornada March 30, 2020 09:33 UTC