La de Felipe Calderón y Ricardo Anaya es una guerra a muerte; una guerra en la que no hay lugar para la reconciliación. Para ello calculó el momento en el que estaría la prensa durante su visita, con la intención de enviar un mensaje de unidad en el PAN. Literalmente le dieron “con la puerta en la cara”. Es decir, resulta que el señor Anaya prometió a todos quienes lo apoyaron para llegar a la jefatura nacional del PAN, que no buscaría la candidatura presidencial desde la jefatura del partido. El 17 de octubre, la página La Otra Opinión detectó el abierto desafío de Felipe Calderón a Ricardo Anaya.
Source: Milenio November 06, 2017 08:37 UTC