“Las implicaciones de esta investigación son nada menos que revolucionarias”, afirmó el profesor McInerney, autor principal del estudio. “Al demostrar que la evolución no es tan aleatoria como alguna vez pensábamos, hemos abierto la puerta a una variedad de posibilidades en biología sintética, medicina y ciencia ambiental”. Una vez identificadas las familias, el equipo analizó el patrón de cómo estas familias estaban presentes en algunos genomas y ausentes en otros. “Estas interacciones entre genes hacen que algunos aspectos de la evolución sean algo predecibles y, además, ahora tenemos una herramienta que nos permite hacer esas predicciones”, añadió Domingo-Sananes. — Mitigación del cambio climático: los conocimientos del estudio podrían informar el diseño de microorganismos diseñados para capturar carbono o degradar contaminantes, contribuyendo así a los esfuerzos para combatir el cambio climático.
Source: La Crónica de Hoy January 05, 2024 03:12 UTC