Los padres de la chica, Timothy y Sharlotte Mott, interpusieron una demanda contra la compañía MPII, propietaria de la funeraria, con el argumento de que el cuerpo de su hija se perdió mientras estaba bajo el cuidado de ese establecimiento. El juicio que ventiló la demanda culminó este martes, con el dictamen contra la funeraria. Los abogados de los Mott habían solicitado al jurado que se otorgara a sus clientes 10 millones de dólares -cinco millones a cada uno- por las angustias mentales pasadas y futuras por la pérdida del cuerpo de su hija. Expertos testificaron en el juicio que la compensación financiera no permitiría a ninguno de los padres experimentar el cierre y los dejaría atrapados en el proceso de duelo. El cuerpo no ha sido localizado hasta ahora y no se han realizado arrestos en el caso, que aún investiga la policía de San Antonio.
Source: Milenio February 14, 2018 01:30 UTC