Los creadores con los que Antón trabajó fueron Celestino Gorostiza, Fernando Wagner, Salvador Novo, Alejandro Jodorowski y Manolo Fábregas, entre muchos otros. En 1956, el primer trabajo de Antón fue la obra La mandrágora, de Maquiavelo, dirigida por Seki Sano, por la que ambos fueron galardonados, uno por el trabajo en la dirección y Antón por la escenografía. David Antón transitó por el teatro universitario, el comercial, el de bajos y grandes recursos, y se puso al servicio del director y los requerimientos de la puesta en escena, como él lo señala. Por el contrario, trabaja de la mano del director después de haber analizado el texto. En el libro, complementados con fotografías de algunas puestas en escena, conserva esa calidad que él imprimía a sus proyectos escenográficos.
Source: La Jornada December 30, 2017 03:09 UTC