Han dicho que la presente gestión no es responsable de las “adquisiciones indebidas” y culpó a la anterior de haberlas realizado. Como ejemplo señalan que los famosos cupcakes fueron requeridos por una funcionaria el 17 de noviembre. Por si fuera poco, otras numerosas perlas similares fueron descubiertas a lo largo del año pasado en las adquisiciones públicas. Los objetivos nacionales ni las estrategias sectoriales nunca cambiaron y continua el dispendio de los fondos públicos, pese al embate de la pandemia. Al final, los cupcakes son solo el símbolo de la manera como el establishment enfoca la crisis sanitaria.

Source: Expreso January 23, 2021 06:11 UTC