Más bien restringido, el grupo se hacía llamar –tal una banda de música norteña– Los Siete de Topo Chico. Lo menos que pude pensar por su título fue que al leerla volvería a sentir el mismo redoble corporal que me cimbraba en silencio al escuchar a los guerrilleros de Topo Chico. ¿Hace cuánto que en México se intentó abolir la tortura como método de confesión de los presuntos delincuentes? En su punto 18 se lee: Que en la nueva legislación no se admita la tortura . Pienso en los motivos que pudieron tener Elías y muchos jóvenes como él para incorporarse a la guerrilla de los años 70.
Source: La Jornada June 27, 2024 12:17 UTC