Este avance refleja el dinamismo de la economía yucateca, aunque la prevalencia de la economía informal evidencia la necesidad de políticas que impulsen la formalización del empleo, especialmente en sectores de alto crecimiento. En otras palabras, sólo 40 por ciento los empleados que laboran en Yucatán están en empresas formales, bien establecidas y con prestaciones. La informalidad laboral implica que no cuentan con seguridad social ni estabilidad en sus ingresos, lo cual limita su acceso a servicios de salud y prebendas. Noticia destacada Preinscripciones Yucatán 2025-2026: Conoce las fechas y requisitos para el trámite en líneaEste fenómeno es especialmente relevante en Yucatán, donde, pese a los altos niveles de ocupación, una gran cantidad de familias dependen de empleos en sectores informales que son menos estables y están sujetos a la variabilidad económica. Además, se observó un incremento en la subocupación —personas que necesitan trabajar más horas— que alcanzó a 4.9 millones, es decir, el 8.2 por ciento de la población ocupada.