Estas celebraciones justifican los estereotipos en el aprendizaje de las infancias y no visibiliza la diversidad de familias, sino que refuerza su construcción de manera tradicional. Creo que la apertura en las ideas y el diálogo debe ser privilegiado sobre todo cuando en nuestro país hay miles de asuntos de interés superior. Si desde la parte gubernamental se insta a la no discriminación esto obedece obviamente a que se debe gobernar para todas las personas que integran a la población. Existe también el día de familia, un día donde cabemos todos, todas y todes. ¿Acaso vale más el festejo de un señor emberrinchado que la integridad de un niño, una niña o un niñe?


Source:   La Jornada
June 16, 2024 11:14 UTC