Cuando el Ejército entró, había gente escondida hasta debajo de las camas. En octubre de 2020, el enfrentamiento entre ambos grupos dejó varios muertos: el Digna Ochoa habla de cuatro ejecutados y dos desollados. La tensión siguió creciendo a lo largo de cuatro años, “con la omisión y la complicidad del gobierno”, afirma Abarca. El presidente López Obrador acaba de decir en la “mañanera” que los desplazados “son pocos”, que su número “no es significativo”. Desde mayo pasado Los Autónomos habían anunciado que entrarían a Tila para hacer justicia casa por casa.