Ejemplos, mencionó, son el jacinto de agua (Eichhornia crassipes), la rana toro (Lithobates catesbeianus), el pez león (Pterois volitans) y la ardilla gris (Sciurus carolinensis). Camacho Cervantes se ha enfocado en el análisis de cómo la contaminación puede variar la conducta de estos animales. La interacción entre especies nativas e invasoras se ve afectada cuando hay contaminación de por medio. Destacó que la exposición a productos químicos tóxicos puede alterar la capacidad de los animales para buscar alimento, reproducirse, evitar depredadores o migrar. También, puede debilitar a las especies nativas, haciéndolas más susceptibles a la competencia o la depredación.


Source:   La Jornada
June 25, 2024 11:56 UTC