Todos los días, por ahí desfilan habitantes de los pueblos originarios, mestizos y turistas que poco saben de estos lugares. Más que crear una cinta de no ficción –un remanso para la vista–, la cineasta trenzó un lazo profundo con este núcleo familiar femenino. En San Cristóbal de las Casas, desafortunadamente aún hay una distancia que se puede ver en cómo nos relacionamos las personas de la ciudad y las de los pueblos indígenas. Parece que existimos de formas distintas aunque vivimos en la misma tierra . Domínguez Ruvalcaba explora la mirada de esas cinco mujeres, quienes le abrieron los ojos.


Source:   La Jornada
July 01, 2024 11:00 UTC